Libertad de acción

Václav Huta ha introducido en Nafo el primer StateMonitor de Chequia

Los nuevos tipos de máquinas y las nuevas tecnologías aportan un amplio abanico posibilidades. Para Václav Huta, se trata de una cuestión muy importante. El señor Huta es el propietario del fabricante de máquinas checo Nafo, y decidió poner en red sus máquinas mediante el software StateMonitor de HEIDENHAIN.

Cuando la espesa niebla matinal cubre la ciudad industrial checa Strakonice, Václav Huta aparca su motocicleta de 1200 GS Adventure a la derecha de la entrada principal de Nafo. Nafo significa "Nástroje a Formy" (‘Herramientas y moldes’). Desde 1992, la empresa fabrica herramientas de fundición inyectada de aluminio, a las que se añadieron tres años más tarde las herramientas de moldeo por inyección. Su emplazamiento no resulta ninguna casualidad: Strakonice posee una larga tradición en lo que se refiere a la fabricación de herramientas para talleres de fundición de aluminio. Desde dicha ubicación, Nafo suministra a los proveedores de los fabricantes de automoción más grandes de Europa.

La segunda puerta a la izquierda conduce directamente al despacho del señor Huta. Mientras que el café se va filtrando, verifica sus correos, y recientemente también el estado del parque de máquinas. Clic. "Es el sueño de cualquier propietario", afirma e indica la vista global de la instalación, dispuesta en el monitor. "Resulta fantástico poder ver en cualquier momento si las máquinas están trabajando y en qué condiciones." Clic. En la pantalla aparece un diagrama circular con diez máquinas, tres de las cuales se muestran en color amarillo y el resto en color verde.

"StateMonitor es un sinónimo de libertad. No únicamente para mí. Sobre todo, para mis empleados, que en horas de explotación que no requieren operario pueden controlar las máquinas desde cualquier sitio."

Václav Huta, Nafo

Herramientas para la industria del automóvil

Los datos los suministra el StateMonitor de HEIDENHAIN. El señor Huta decidió conectar al sistema la totalidad de las diez máquinas principales. Desde la CME española, de 18 años de antigüedad, hasta las modernas SAMAG TFZ 3L y FPT DINOX 350. "En Navidad, decidí hacerme un regalo", afirma mientras le brillan los ojos. Con la SAMAG, una máquina de desbaste y taladradora para orificios profundos, y la FPT, que dispone de un cambiador de husillo y que por lo tanto puede efectuar tareas de desbaste y acabado dinámicamente, Nafo está bien equipada. La razón es que mediante dichas máquinas es posible fabricar completamente herramientas de impresión y moldeo por inyección de grandes dimensiones, que Nafo produce predominantemente para la industria de la automoción. La empresa suministra a proveedores como Magna, KSM o Gruber & Kaja, que a su vez producen piezas para BMW, Audi, Škoda y WABCO. "Cuanto más grande es la máquina, menor es la competencia", dice el señor Huta. Y se echa a reír.

Entusiasmo por las máquinas y los motores

Václav Huta tenía doce años cuando su abuelo le regaló un ciclomotor que estaba plenamente convencido de que no volvería a correr. Sin embargo, el nieto pidió la opinión de sus vecinos de más edad y empezó a trabajar con perseverancia. Echaba humo y olía a mil demonios, pero finalmente arrancó. "Poder devolver la vida a dicha máquina cuando estaba en un estado tan ruinoso es un sentimiento fabuloso. Dicho acontecimiento me marcó profundamente." La resurrección del ciclomotor fue el detonante de una gran pasión que Václav Huta tenía por las máquinas y los motores. El la estudió y luego se trasladó desde su ciudad natal Praga hasta Viena, para trabajar en Webasto. Transcurridos diez años, empezó a trabajar en CAG Holding, y se convirtió más tarde en el gerente de la filial Nafo 2, situada en Eslovaquia.

El primer StateMonitor de Chequia

Tras la venta del taller de construcción de moldes eslovaco, junto con el taller de fundición, Huta se trasladó a Strakonice y empezó a trabajar en Nafo 1. Durante ocho años dirigió la empresa, antes de adquirirla íntegramente hace tres años. "Pude formar Nafo y la llevé hasta la cima, ya que quería saber de lo que era capaz la empresa." Desde entonces, no ha modificado en absoluto su estilo directivo. "Únicamente, se ha incrementado la libertad de acción." Cuando Huta desea invertir en una SAMAG o en una FPT, lo hace sin dar ningún rodeo. Lo mismo puede decirse para la introducción de nuevos programas, y asimismo en lo que se refiere a StateMonitor. El primero ya lo tuvo en Chequia. "Hoy en día, es imprescindible reaccionar rápidamente para poder avanzar." Afirma. Es preciso que Nafo crezca y para ello, es imprescindible que Huta descubra su potencial oculto.

Monitorización del funcionamiento autónomo

A fin de cuentas, se trata de transparencia: ¿dónde se esconde el material de reserva de la empresa? ¿Cómo puede utilizarse? "En nuestras instalaciones tenemos dos turnos, y un tercero sin operarios sería factible." A este respecto, StateMonitor desempeñaría un papel muy importante. Dicho software podría monitorizar la explotación autónoma de las máquinas por la noche y durante el fin de semana, y mostrar sus averías o períodos de inactividad. "Eso se llama tener libertad. De este modo, desde cualquier lugar y de un vistazo se dispone del estado del parque de máquinas. Y ya no es imprescindible que mis empleados estén al lado de la máquina, a fin de poderla controlar."

Huta sigue hablando de la palabra "libertad" y de la valentía necesaria para utilizarla como propietario, es decir, efectuar una gran inversión. "A veces, mis decisiones penden de un hilo", afirma y escoge las palabras cuidadosamente. "Sin embargo, es imprescindible ser algo atrevido para poder salir adelante."

Cuando la presión se hace insostenible, Václav Huta se sube a su motocicleta. La razón es que a partir de la primera curva está obligado a desconectar. "Después de un paseo, me siento fatigado. Pero mi cabeza está bien clara y tengo las ideas ordenadas." Entonces, vuelven la creatividad y la ambición. Del mismo modo que cuando tenía doce años devolvió a la vida una motocicleta en estado ruinoso.